Babia

Ayer me encontré en la calle con una sujeta que cargaba un bebé. Me saludó efusiamente por mi nombre, y me preguntó por mi trabajo, mis cosas, mis amigos. Yo le pregunté por su bebé, su trabajo, sus cosas. Me contó que esperaba otro bebé, que seguía trabajando en el lugar de siempre y propuso que nos juntáramos a tomar mate un día de estos. “¡Dale!”, le dije entusiasmado. Nos despedimos después de hablar casi 20 minutos.

Naturalmente, no tengo idea de con quién me encontré, aunque su cara me suena familiar. ¡CÓMO ESTAMOS! Y eso que todavía no es diciembre. Que alguien me mande un memorex por favor, gracias.