Personal, te deseo lo peor
Peleles con caritas de buenos.
Mi empresa de telefonía celular ha despertado en mí los más primitivos instintos salvajes. Tengo ganas de entrar al local en hora pico y darles con una porra a los primates incompetentes que no pueden hacer andar las cosas como corresponde.
Hoy intenté cargar crédito y la locutora me dijo “este servicio no está disponible” (!). Necesitaba usar el celular de forma urgente por el laburo. Para colmo el servicio de atención al cliente daba ocupado.
Llamé al Club Personal y el desequilibrado operador que me atendió me pidió TODOS mis datos para poder realizar un canje por crédito. Después de interrogarme media hora me dijo: “disculpe, el sistema está caído, pero es mi sistema, eh. Cuelgue y llame, que otro operador va a poder realizarle el canje”.
Respiro profundo. Cuento hasta 11. Vuelvo a discar y una amiga del desequilibrado encara de nuevo con el interrogatorio. “Mire, le acabo de dar toda esa información a un sujeto que me atendió recién”, le explico a la operadora siniestra. Me contesta que el sistema no lo tomó. Ya casi de memoria le recité fecha de nacimiento, dirección, DNI, estudios, blah.
Entonces ocurre lo peor:
Operadora siniestra: (TONO PERSPICAZ, COMO SI HUBIESE DESCIFRADO UN RESONANTE CASO POLICIAL) Su dirección me da error.
Lolo: (IMPASIBLE) Ajá, ¿y?
Operadora siniestra: ¿Está seguro de que me dio la dirección correcta? (APLICA TONITO DE “PILLÍN, NO ME ESTARÁS HACIENDO TRAMPA…”).
Lolo: ¿Me está cargando? Usted tiene acceso a todos esos datos desde antes. ¿Qué culpa tengo que le dé error el sistema malogrado que tienen ahí?”.
Operadora siniestra: Hummmm. Es un error del sistema, pero es en mi equipo. Cuelgue y llame, que otro operador va a poder realizarle el canje.
De ahí en adelante no me acuerdo más nada porque perdí el conocimiento.
Lo único que quiero, señores de Personal, es cargar crédito y eso, sepanlo, los beneficia a ustedes. ¿Es taaaaaaan difícil? Tengo la porra al alcance de la mano y no tengo miedo de usarla. Ya lo saben.
* * * * * * *
Y ahora noticias de interés general (?).
En la encuesta por el rediseño del blog quedó primera la opción “¡Genial, lo amo!” con el 34 por ciento del total de votos escrutados. En segundo lugar quedó “¿Qué es “opina”?", con el 27 por ciento de las adhesiones. Estas dos opciones deberían ir a un ballotage, pero bueno, el reglamento interno de Reflexiones a la Lontananza no lo prevé.
Por lo tanto consagramos al nuevo diseño como ganador indiscutido aunque vamos a extrañar la vieja plantilla. Un minuto de silencio por ella. Fin de la transmisión.
Hoy intenté cargar crédito y la locutora me dijo “este servicio no está disponible” (!). Necesitaba usar el celular de forma urgente por el laburo. Para colmo el servicio de atención al cliente daba ocupado.
Llamé al Club Personal y el desequilibrado operador que me atendió me pidió TODOS mis datos para poder realizar un canje por crédito. Después de interrogarme media hora me dijo: “disculpe, el sistema está caído, pero es mi sistema, eh. Cuelgue y llame, que otro operador va a poder realizarle el canje”.
Respiro profundo. Cuento hasta 11. Vuelvo a discar y una amiga del desequilibrado encara de nuevo con el interrogatorio. “Mire, le acabo de dar toda esa información a un sujeto que me atendió recién”, le explico a la operadora siniestra. Me contesta que el sistema no lo tomó. Ya casi de memoria le recité fecha de nacimiento, dirección, DNI, estudios, blah.
Entonces ocurre lo peor:
Operadora siniestra: (TONO PERSPICAZ, COMO SI HUBIESE DESCIFRADO UN RESONANTE CASO POLICIAL) Su dirección me da error.
Lolo: (IMPASIBLE) Ajá, ¿y?
Operadora siniestra: ¿Está seguro de que me dio la dirección correcta? (APLICA TONITO DE “PILLÍN, NO ME ESTARÁS HACIENDO TRAMPA…”).
Lolo: ¿Me está cargando? Usted tiene acceso a todos esos datos desde antes. ¿Qué culpa tengo que le dé error el sistema malogrado que tienen ahí?”.
Operadora siniestra: Hummmm. Es un error del sistema, pero es en mi equipo. Cuelgue y llame, que otro operador va a poder realizarle el canje.
De ahí en adelante no me acuerdo más nada porque perdí el conocimiento.
Lo único que quiero, señores de Personal, es cargar crédito y eso, sepanlo, los beneficia a ustedes. ¿Es taaaaaaan difícil? Tengo la porra al alcance de la mano y no tengo miedo de usarla. Ya lo saben.
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Y ahora noticias de interés general (?).
En la encuesta por el rediseño del blog quedó primera la opción “¡Genial, lo amo!” con el 34 por ciento del total de votos escrutados. En segundo lugar quedó “¿Qué es “opina”?", con el 27 por ciento de las adhesiones. Estas dos opciones deberían ir a un ballotage, pero bueno, el reglamento interno de Reflexiones a la Lontananza no lo prevé.
Por lo tanto consagramos al nuevo diseño como ganador indiscutido aunque vamos a extrañar la vieja plantilla. Un minuto de silencio por ella. Fin de la transmisión.